Monday, September 08, 2008

ENCUENTRAN CANAL DE AGUA DE LA ÉPOCA COLONIAL EN CENTRO HISTÓRICO DE AREQUIPA

ENCUENTRAN CANAL DE AGUA DE LA ÉPOCA COLONIAL EN CENTRO HISTÓRICO DE AREQUIPA Arequipa.- Obreros que realizan trabajos de puesta en valor en la primera cuadra de la calle Mercaderes, en el Centro Histórico de Arequipa, encontraron un canal de agua de la época colonial de 30 metros de largo, hecho que fue reportado a las autoridades de la zona. Especialistas del Instituto Nacional de Cultura (INC) efectuaron el registro del canal de sillar que habría dotado de agua potable a las casonas del Centro Histórico en la época colonial, así como para regar las huertas que estas propiedades tenían en su interior. El arquitecto Eduardo Málaga, residente de la obra, manifestó que el registro concluirá hoy lunes sin afectar el normal desarrollo de los trabajos que consisten en la apertura de zanjas para la instalación de un drenaje pluvial. “En los próximos días el INC informará la forma de preservar el canal que data de la época colonial, en tanto nosotros continuamos con nuestra labor teniendo especial cuidado en la apertura de zanjas”, señaló. Personal del INC refirió que el canal cruzaría varias calles del centro arequipeño, dado que durante la Colonia la población se abastecía de agua proveniente de manantiales de Yumina y Characato, que llegaba a través de canales de sillar a las casonas. Meses atrás se encontró otro canal de sillar en el tradicional barrio de San Lázaro, lo que reafirmaría que la población de Arequipa en la época de la Colonia consumía agua potable y utilizaba el líquido, además, para regar sus huertas. (Andina).

Monday, September 01, 2008

PONEN EN VALOR CENTRO HISTÓRICO DE AREQUIPA PARA CONSERVAR TÍTULO DE PATRIMONIO CULTURAL DE LA HUMANIDAD

PONEN EN VALOR CENTRO HISTÓRICO DE AREQUIPA PARA CONSERVAR TÍTULO DE PATRIMONIO CULTURAL DE LA HUMANIDAD

Plaza de Armas de Arequipa.
   
Arequipa.- Atendiendo las recomendaciones de la Unesco para que el Centro Histórico de Arequipa mantenga el título de Patrimonio Cultural de la Humanidad, el municipio provincial iniciará hoy los trabajos de puesta en valor de la calle Mercaderes y la plaza 15 de agosto, ubicadas en la zona monumental de la Ciudad Blanca. Francisco Ampuero Bejarano, subgerente del Centro Histórico de la comuna provincial, indicó que la ejecución del proyecto comprende el alcantarillado, cableado subterráneo y la recuperación monumental de ambas zonas. El funcionario edil señaló que dichos trabajos forman parte del plan de trabajo de recuperación del centro histórico, el cual fue diseñado a inicios de año y complementado con las observaciones realizadas por la Unesco. El proyecto demanda una inversión de cuatro millones de soles, monto aportado por el gobierno regional y la Caja Municipal de Arequipa. La comuna ejecutará los trabajos por administración directa. Los trabajos de drenaje pluvial comprenderán la instalación de una rejilla a lo largo de las calles para colectar las aguas de las lluvias, mientras que los de cableado subterráneo implican la instalación de redes eléctricas de media y baja tensión. La puesta en valor comprende también la recuperación monumental de la calle Mercaderes, lo que implica el arreglo del pavimento de la vía, el cual será elevado al nivel de las veredas, por ser esta zona enteramente peatonal. Las veredas serán remozadas utilizando piedra laja granítica y piedra laja pizarra. Asimismo, agregó que se pondrá en valor la arquitectura de las fachadas de las casas ubicadas en Mercaderes y de las que rodean la plaza 15 de agosto, tras lo cual solicitó a la población comprensión por los inconvenientes que pudieran ocasionar los trabajos.

Catedral de Arequipa.

INSTALAN COMITÉS DE SEGURIDAD TURÍSTICA PARA VELAR POR TURISTAS EN AREQUIPA 

Plano Turístico de Arequipa. Arequipa.- 

Diez comités de seguridad turística se instalaron en igual número de distritos arequipeños con el propósito de velar por la tranquilidad de los visitantes, informó Edgar Luna, funcionario de la Gerencia Regional de Comercio Exterior y Turismo. Detalló que cada comité es presidido por el alcalde del distrito e integrado por el comisario, el gobernador y representantes de la asociación de vecinos y de los locales comerciales de la jurisdicción. El objetivo de los comités de seguridad turística es ofrecer una estadía segura a los visitantes en restaurantes, transportes y centros o áreas turísticas, explicó. Los comités se implementaron en los distritos de Arequipa, Quequeña, Characato, Sabandía, Socabaya, Paucarpata, José Luís Bustamante y Rivero, Yanahaura, Cayma y Sachaca. Dichas jurisdicciones, precisó, son las más concurridas por los turistas que arriban a la provincia de Arequipa. Las zonas en mención ofrecen al visitante áreas naturales como campiñas, comida típica arequipeña, monumentos históricos, deporte de aventura, y zonas de esparcimiento que en horas de la noche se tornan inseguras. Luna refirió que se evalúa extender esta iniciativa a otras provincias, como Caylloma, Condesuyos y La Unión, que registran una creciente afluencia turística. (Andina).

Santa Catalina.

Thursday, August 07, 2008

LOS CUBOS IMPOSIBLES Y OTRAS GEOMETRIAS

LOS CUBOS IMPOSIBLES Y OTRAS GEOMETRIAS
Rothko: en dos colores
Op Art: Vasarely
Los Cubos Imposibles: Arte Visual.

Sunday, July 06, 2008

DISEÑO/ ARMANDO ARTEAGA

DISEÑO

Por Armando Arteaga

El lápiz:  caballero divagante
sobre la fría nieve del papel
me acompañó siempre
en las amanecidas largas
de mi novia la ventana.

La acuarela aceptó en las tardes
el inesperado olvido
de mi sedienta agua pura
para escoger: ¿la arquitectura o la poesía?.

Mis maestros los ladrillos,
fueron forjando el muro infinito
de pinceles inconfundibles
donde la tinta chorreaba
 en busca de la belleza simétrica
de ese edificio ecléctico
dedicado a la geometría.




Monday, May 05, 2008

DE LA HABANA CON AMOR/ CÈSAR LÈVANO

El historiador cubano Eusebio Leal cuenta cómo se logró recuperar La Habana Vieja y habla de su aprecio y admiración por el Perú. 

De La Habana con amor Cèsar Lèvano
Director.

DATO “A lo largo del siglo, los historiadores y maestros de esta isla han cultivado con intensidad eso que, sin vergüenza ni sonrojo, podemos llamar «el culto a Martí». No mediaba en ello el deseo egoísta de llamar la atención hacia lo nuestro como algo diferente, único, pero lo cierto es que nuestro Apóstol tenía cualidades excepcionales dentro del grupo de hombres de pensamiento del continente ”, de Eusebio Leal. El historiador cubano Eusebio Leal nos habla en esta entrega final de la entrevista, sobre su obra más celebre, la reconstrucción de La Habana Vieja, el centro histórico de La Habana, recuperado con una titánica y paciente labor que ha tenido como principales protagonistas a los vecinos de aquella zona, que parecía perdida por el deterioro y el paso del tiempo. 
 
-Muchos creen que la reconstrucción de La Habana vieja ha sido un logro con objetivos turísticos, pues se ha convertido en uno de los principales atractivos de la ciudad. ¿Qué nos puede decir al respecto? 
 -Lo que hemos logrado es la restauración de una parte de la antigua ciudad de La Habana. La Habana es muy grande. Su centro histórico, algo así como la Lima cuadrada, es muy grande, son varios kilómetros cuadrados. Casi 90 manzanas y es un esfuerzo grande, y al mismo tiempo quizás, su connotación más importante, lo más interesante de esto sea su alcance social. Es un proyecto que no es figurativo, que no es turístico; que entraña todo eso, sin lugar a dudas, pero que es esencialmente una búsqueda, como siempre ocurre en estos casos, o debe ser una búsqueda de raíces, de identidad, de carácter, de perfil de un país. Pero también una fuente de empleo para la comunidad que lo habita, una solución de problemas angustiosos para la gente de las clases más humildes, que son las que ocupan -generalmente en América Latina- los centros históricos.  

-¡Qué interesante! Y ahora se ha convertido en un centro turístico.  
-Ahora, La Habana Vieja se ha convertido en un gran parque nacional. Ahí acuden no solamente las personas que vienen de todas partes del mundo, sino también las familias cubanas, nuestras familias, los niños de las escuelas. Van a los festivales culturales de teatro, de música, de libros, que se celebran o tiene por escenario un centro histórico que es ahora fundamentalmente peatonal, en el cual no se ha sacado a la gente, sino que se ha buscado que participen en el proyecto restaurador. No cabe duda de que no necesariamente todo el mundo puede vivir en el centro histórico. Un predio, como una Casa de las 12 puertas en Lima, o en cualquier otro palacio, no estaba ya ocupado por una familia señorial, sino por decenas de familias. Toda restauración supone una disgregación, pero se ha tratado de que tenga un sentido de justicia y de equidad. 
 
-De la Lima antigua, usted conoce un poco. ¿Cuándo fue la primera vez que vino a Lima?  
-Hace muchos años. He conocido a los distintos alcaldes de Lima que quisieron realizar el trabajo por y para Lima. Recuerdo muy particularmente, con mucho afecto, al que fue mi gran amigo, el arquitecto Eduardo Orrego Villacorta. Recuerdo con sincera admiración a mi querido amigo, Alfonso María Delidorio Barrantes Lingán, un hombre que tuvo el gran mérito, a mi juicio, de vivir pobre y morir pobre, habiendo estado en la política -cosa que en América Latina es un título de honor que no concede ninguna universidad- y que se preocupó mucho de los niños, de los pobres. Y admiro la labor que realizó el alcalde Alberto Andrade, porque creo que trabajó también en la dirección de darle una dimensión al centro histórico, que yo creía francamente insalvable, tal y como lo vi a lo largo del tiempo. 
 
-¿Se ha salvado? ¿Usted cree? 
- Bueno yo creo que, por lo menos, se logró detener esa cantidad de demoliciones para hacer playas de estacionamiento, esa cantidad enorme de ambulantes. Pero lógicamente, Lima es inmensa, La Habana es bella y es grande. Pero Lima es una dimensión de la arquitectura diferente. Son espacios urbanos colosales, son espacios comunitarios realmente impresionan. Cuando una ciudad deja de ser el centro, o se le retiran las funciones vitales, comienza su decadencia. A mi me gustaba mucho el barrio de Acho, me encanta el Rímac, me gustan todos esos barrios que conformaron la Lima más allá del río y eran maravillosos. Y desde luego, la Lima miraflorina que conocí, que era la Lima de las librerías, la Lima del caminar y del andar.  

-¿Esa Lima se puede salvar? ¿se ha salvado?  
-Yo creo que ni La Habana tampoco se ha salvado. Yo he hecho una pequeña parte y queda poquísimo por hacer. Cuando me han preguntado qué tiempo necesitaría para ver el resultado de lo que yo quisiera, de lo que yo imagino, que es labor de muchos. Antropólogos, historiadores, arqueólogos, ingenieros civiles, obreros. Siempre digo “me faltaría una vida hacerlo”. Hoy, como usted sabe, hay dos tendencias. Una tendencia que busca la revalorización por razones culturales. Hay otra tendencia que cree que todo está sujeto a la arbitrariedad del mercado y que los terrenos valen más que lo que está edificado. Entonces, en muchas ocasiones, usted ve realmente barbaridades en los centros históricos. Nosotros no tenemos nada en comparación de lo que tiene el Perú. Vivimos muy orgullosos de las siete ciudades antiguas: de Trinidad, de Santiago de Cuba, de Baracoa. Pero ¿qué me dice usted cuando entramos aquí en el interior, y vamos a Cusco y vamos a ciudades maravillosas como Arequipa o Trujillo, que son capitales señoriales, donde además floreció y existe un artesanado capaz de manifestar su cultura en toda su integridad, desde la cultura, la comida. Usted ve esas variaciones gastronómicas riquísimas, después observa todo el arte del tejido. Yo creo que hay pocos países en el mundo que tienen el privilegio de un arte textil, creo yo sólo Guatemala, el Alto Perú, quiero decir Bolivia, y el Perú, el arte del telar. Después la cerámica. Estamos hablando de un arte milenario, ancestral que continúa. La orfebrería y sobre todo las personas, son como el resultado de un encuentro de civilizaciones. Yo recientemente estuve en España visitando, no había estado nunca, en la Mezquita de Córdoba, y no puede usted imaginarse qué emoción, cuando al finalizar la visita a la mezquita, en el lugar más recóndito de la mezquita, encuentro la tumba del Inca Garcilaso de La Vega. Y veo allí la gloriosa bandera del Perú, y entonces digo: Dios, qué maravilla, qué hemos sido, qué somos, qué hemos podido ser, qué seremos.  

Mariátegui y los cubanos 

- Usted ha estado varias veces en el Perú. ¿Qué imagen tiene de José Carlos Mariátegui? 
-Así como Gramsci fue para Italia la explicación en Europa Occidental de la concepción suprema del socialismo, lo fue Mariátegui en el Perú y para toda América. La lectura de sus obras, de sus cartas, mis conversaciones con uno de sus más grandes biógrafos, Ricardo Luna Vegas, me acercaron muchísimo a la interpretación y el conocimiento de un Mariátegui profundo. Mariátegui es quizás la aportación intelectual y la aportación sociológica más importante del Perú de su tiempo al pensamiento latinoamericano. 

- ¿En Cuba existe alguna presencia de Mariátegui? 
- Es probable que usted le pregunte a un joven que no sea universitario de Humanidades sobre Mariátegui, y no pueda responderle con exactitud, pero no puede preguntarle usted a un solo intelectual, a un solo escritor, a un poeta, a un literato que no le responda quién es Mariátegui, una figura esencial para América.  

(1) Fueron vecinos de la zona quienes juntos a Eusebio Leal, recuperaron el Centro Histórico de La Habana. 
(2) Calles del centro histórico de La Habana. 
(3) Demostraciones culturales realzan el paisaje cubano. 
(4) Leal ha recibido importantes reconocimientos.  

LA Primera, Lima, 30 de Abril del 2008.

Sunday, April 20, 2008

PSICOANÁLISIS DE LA CIUDAD/ POR HÉCTOR VELARDE

PSICOANÁLISIS DE LA CIUDAD 
Héctor Velarde  
 La subconsciencia de una casa de Lima está en el techo mismo de esa casa. La subconsciencia de la ciudad entera está en todos sus techos. Es lo contrario de lo que pasa en los casos normales de psicoanálisis en general. Lo sub de la conciencia, debe estar sub, es decir abajo. Aquí, en Lima, está arriba. En los techos. En Londres, por ejemplo, ciudad tan seria, la subconsciencia está en los sótanos.Lo no consciente pero penetrado se hunde y duerme en la subconsciencia. Entre nosotros se tira al techo donde se ventila, se moja su poquito o se asolea.

                  Los techos de Lima inspirarón el humor literario de Velarde.

Desde que se construye una casa, lo no pensado, lo oculto, lo reflejo, lo que parece no servir, innecesario o inaparente, va directamente al techo. Sobre todo lo sucio. Son grandes plataformas suspendidas y casi siempre inestables donde se acumulan en capas superpuestas toneladas de basura mezclada con objetos como retratos de familia, bacinicas, zapatos viejos, comoditas picadas y bicicletas rotas. Eso se combina con la vida misma de la subconsciencia que se hace presente por medio de pavos cantores, patos bañistas, cuyes asustadizos, gallinas ponedoras, perros bravos, gatos equilibristas, loras habladoras, cabritas quejumbrosas, plantas con flores, arbolitos en macetones y barriadas enteras de totora con braseros de carbón de palo y aparatos de televisión con novelas a todo meter.

Los techos desordenados y multicolores de Lima.  
Como entre la subconsciencia y la inconsciencia no hay sino un poco de torta o, a lo más, algunos ladrillos pasteleros y una que otra teatina, el fenómeno psicoanalítico socio-económico de los techos se enriquece con avisos luminosos más grandes que las casas, tanques de cilindro en batería o de concreto en cascada, casetas de ascensores como trampolines de piscinas olímpicas, chimeneas de todas las industrias, cuartos de servicio pero que son de alquiler, tenderetes napolitanos y playas de estacionamiento con rampa.

Los techos empezan a bajar al nivel redondo de la tierra, los nuevos asentamientos populares limeños. 
El problema de limpiar los techos de Lima es pues un problema de psiquiatras, psiquiatras municipales y urbanistas. Es de felicitarse que lo hayan encarado. Era lo indispensable descargar el peso de esas subconsciencias acumuladas en las alturas y darle más garantías a la población disminuyendo la presión de las inconsciencias explosivas, todo lo cual puede enterrar, dentro de poco, bajo una lluvia apocalíptica froidiana-capitalista, a la capital enferma. ¡Pero qué curación más delicada y difícil! En psicoanálisis se conocen las monstruosidades que afloran en la subconsciencia y las amenazas de la inconsciencia. La limpieza de los techos de Lima puede dejar en libertad esas monstruosidades y desatar la amenaza de lo irracional. La subconsciencia no tiene fondo y la inconsciencia no tiene contenido: las casas pueden quedar vacías y los sesos de la ciudad regados por las calles y confundidos con putrina de anchoveta. ¿La limpieza no podría, quién sabe, hacerse con helicópteros para no turbar demasiado la psiquis de los limeños cuyas azoteas son sus propios cerebros pero patas arriba?  ("Antología Humorística". Lima : Peisa,1973.)

Los libros de Héctor Velarde donde el humor supera los limites "profesioneles" de la arquitectura, el urbanismo y la literatura.

Monday, April 14, 2008

EL SIGLO XXI: ¿FINAL DE LA MODERNIDAD EN LA ARQUITECTURA?/ POR ARMANDO ARTEAGA

EL SIGLO XXI: ¿FINAL DE LA MODERNIDAD EN LA ARQUITECTURA? 


Por Armando Arteaga .


El modernismo se ha definido como la afición excesiva a las cosas nuevas con menosprecio de las cosas antiguas, especialmente en las bellas artes, la literatura y la religión. Lo moderno es lo que ha sucedido recientemente, es lo que se vive en la actualidad o se ha vivido hace poco tiempo. La modernización es dar forma o aspecto nuevo a las cosas antiguas. Lo moderno es una constante en las vanguardias que siempre se opone al orden viejo.
F. L. Wright, miró hacia el naturalismo con gran propórción por las cosas simples.

Frank Lloyd Wright dedica desde sus primeros escritos en “Modern Arquitecture” muchas inquietudes sobre lo moderno en los temas de arquitectura, y aún en “The Living City” su visión emersoniana sigue siendo una postura de apertura modernista. La arquitectura para realizarse necesita del espacio vital, no puede hacerse en el vacío, y la modernidad presume de la “utopía” para proponer acciones nuevas, “provocaciones recientes”. Ya Arnold Husser define las obras de arte como “provocaciones”, y la modernidad fue la provocación más tentadora del nuevo espíritu, su vigencia está en que trae la innovación de la forma y el contenido, o el formalismo visual que analizó Rudolf Arnheim.

The Nathan G. Moore House by Frank Lloyd Wright.

Jaques Derrida aludiendo a la “metáfora arquitectónica” dice que “la cuestión de la arquitectura es de hecho el problema del lugar, de tener lugar en el espacio: “El establecimiento de un lugar que hasta entonces no había existido, y que está de acuerdo con lo que sucederá allí un día: eso es un lugar.”

Le Corbusier miró la nueva realidad del siglo XX, y con la geometria más ortodoxa postuló ir hacia una nueva arquitectura.

La advertencia de Robert Venturi sobre “una arquitectura válida evoca muchos niveles de significados y se centra en muchos puntos: su espacio y sus elementos se pueden leer y funcionan de varias maneras a la vez”, provoca revisar los nuevos significados y los nuevos contenidos para buscar otras interpretaciones, ese vacio advierte la falta de una vigente nueva “crítica” en la arquitectura y para la arquitectura.
No se trata solo de “saber ver la arquitectura” como lo manifestaba Bruno Zevi, se trata de que está (“hacia una nueva arquitectura”) sirva al componente social, y que aporte al proceso histórico del suceso arquitectónico, en “lo nuevo” viene también explicito “lo moderno”. 

Heidi Weber Museum de Le Corbusier, refugio humanitario del encuentro para el arte y la arquitectura.

Venturi reclamaba en su “suave manifiesto a favor de una arquitectura equívoca”: la complejidad y contradicción en la arquitectura, explica su desagrado por la incoherencia y la arbitrariedad de la arquitectura incompetente y las complicaciones rebuscadas del pintoresquismo o el expresionismo. Hablaba de una arquitectura compleja y contradictoria basada en la riqueza y ambigüedad de la “experiencia moderna”, incluyendo “la experimentación” que es intrínseca al arte mismo. En todas partes, dice Venturi, excepto en la arquitectura, las complejidades y las contradicciónes se han reconocido siempre: desde la demostración de Godel, de la incompatibilidad final de las matemáticas al análisis de la poesía “difícil” de T.S. Eliot, y a la definición de las características paradójicas de la pintura de Joseph Albers.  

Nada es excluyente en arquitectura: matemáticas y poesía, no son asuntos contradictorios. Al contrario, debe darse el encuentro vital que muchas veces se manifiesta en las reflexiones del Modulor de Le Corbusier, o en los “cantos” y “teorías” del imaginismo de Ezra Pound. La “modernidad” no ha muerto porque ha llegado la post-modernidad. La postmodernidad es sola una maniobra literaria, no existe. Las vacas que comen flores de Robert Frost y el descubrimiento salvaje de la vitalidad americana que postulara Archibald MacLeish, son parte del augurio de la “modernidad” actual whitmaniana, de esta “moderna” convención sistémica de ideas nuevas para ir hacia la nueva arquitectura

Meis van der Rode profetizó parte de este ¡futuro diferente! que ya pasó: el modernismo... Meis fue otro avanzado geometra pitagorico e integral.  

La modernidad no está en el velatorio de la historia, los modernistas viven todavía en la refrigeradora, esperan congelados para despertar “vigentes” , sobre las cenizas del mediocre post-modernismo actual, tan pintoresco ahora como un sándwich pintado en una vitrina del supermarket.

Mies van der Rohe's Farnsworth House., buscó -tambien- el encuentro con la natruraleza y con cierto ordenamiento lógico geometrico-kantiano de unir las partes con el todo.  

Y, es a este lugar contradictorio del análisis y la proyectacción de los nuevos proyectos que debe enrumbar el nuevo dilema del trabajo actual de los arquitectos que no se sienten representados en la estética de la postmodernidad. A este lugar, vigente y por ahora desolado, de la “otra” nueva arquitectura moderna, y “ultima modernidad” debe acudir también la “nueva” crítica de la arquitectura. Tal vez, visión kantiana a favor de "la crítica de la razón pura" para desarrollar un derecho cosmopolita buscando una hospitalidad universal para la arquitectura contemporanea, aunque algunos de sus "proyectos" son unos verdaderos "mamarachos" que pocos soportan, porque el capitalismo actual trata de imponer lo grotesco como estética. Y, en eso estamos, al divagar en la historia de la arquitectura contemporánea, de acuerdo.  

Del libro: "La modernidad en la arquitectura".

CRÍTICA A LA "CRÍTICA ARQUITECTÓNICA" / ARMANDO ARTEAGA

  De mi libro "La modernidad en la arquitectura", va un capitulo acerca de "Crítica a la "crítica arquitectónica"....